Rado HyperChrome

La colección HyperChrome es la más versátil del catálogo de Rado. Ninguna otra serie de la marca suiza cuenta con tan amplia selección de modelos con funciones, materiales y diseños diversos. La colección HyperChrome ofrece un poco de todo: desde cronógrafos deportivos y elegantes relojes de vestir hasta modelos retro y relojes de buceo fabricados en materiales como el acero inoxidable y la cerámica de alta tecnología, de titanio o plasma. Rado apuesta principalmente por movimientos automáticos en esta colección, aunque algunos modelos también están provistos de movimientos de cuarzo, lo cual amplia la gama de la línea.

Las verdaderas estrellas de esta colección son los cronógrafos que están disponibles en numerosas variaciones de colores. Sin embargo, el clásico reloj de buceo Captain Cook y el reloj retro 1616, cuyos diseños se inspiran en el pasado, también cautivan con su encanto. Por otro lado, el HyperChrome Ultralight fascina a los amantes de los relojes de poco peso y el estilo elegante. Y los relojes de vestir de la colección también resultan espléndidos con o sin diamantes.

Por supuesto, la gran variedad de modelos ofrece una amplia gama de precios. Un reloj de vestir para dama fabricado en acero inoxidable, con un movimiento de cuarzo y una ventana para la fecha a las 3 en punto comienza en el rango de los 1000 euros. Si prefiere un reloj con un movimiento automático, el precio suele establecerse en los 1200 euros. Un modelo masculino fabricado en acero con un movimiento de cuarzo y una correa de piel ronda los 1200 euros, mientras que los ejemplares con un brazalete de acero alcanzan los 1300 euros. El HyperChrome Automatic es un modelo similar pero aloja un calibre automático ETA. Cuesta algo menos de 1300 euros con una correa de cuero, y 70 euros más si incluye un brazalete de acero inoxidable. Si prefieres un reloj de cerámica de alta tecnología, prepárese para invertir alrededor de 1300 euros (modelo automático femenino) y 1600 euros si prefiere hacerse con la versión para hombre. El modelo en un tono marrón cálido con las agujas y los índices chapados en oro rojo es sin duda especial y sofisticado. El precio de un ejemplar sin usar cuesta un poco menos de 2600 euros.

Los HyperChrome Automatic Diamonds se encuentran en un rango de precios similar. La caja está disponible en los colores blanco, negro, marrón y un tono metálico. El precio de un modelo femenino de color blanco con cuatro diamantes marcando los índices ronda los 2500 euros. Un reloj de caballero fabricado en cerámica negra con doce índices engastados de diamantes y agujas doradas alcanza los 2800 euros. Los modelos con un bisel adornado de diamantes ascienden a los 3850 euros.

Rado ofrece el cronógrafo HyperChrome en una versión con una caja monobloque de cerámica de alta tecnología y un calibre automático ETA 2894, así como un modelo de cuarzo con una caja de acero inoxidable. Ambos relojes son fáciles de diferenciar: el modelo automático coloca las subesferas para los contadores de 30 minutos y 12 horas, así como el pequeño segundero a las 9, 6 y 3 en punto, mientras que la ventana para la fecha se posiciona entre las 4 y las 5. Los relojes de cuarzo colocan el pequeño segundero a las 6 y los contadores de minutos y horas a las 2 y 10 en punto, respectivamente. La ventana para la fecha pasa a posicionarse a las 4 y, ambos modelos, revisten las agujas y los índices de lumen. Asimismo, el bisel de Ceramos incorpora una escala taquimétrica.

Por supuesto, los relojes de cuarzo son más asequibles. El precio de los modelos sin usar comienza en el rango de los 1100 euros. Un cronógrafo automático HyperChrome con un calibre mecánico y una caja de cerámica en buen estado de conservación ronda los 1800 euros, mientras que los modelos sin estrenar alcanzan los 2800 euros. Invirtiendo cerca de 650 euros más, el cronógrafo Match Point, del que se lanzó solo 999 ejemplares al mercado, pone de manifiesto la estrecha relación de Rado con el tenis. Como un guiño a la puntuación de un partido de tenis, los números 00, 15 y 40 se encuentran en el pequeño segundero, mientras que el 30 aparece en el contador de 30 minutos. El contador de 12 horas ofrece un diseño que se asemeja a una red de tenis.

A principios de 2018, Rado presentó a un nuevo miembro de la familia: el HyperChrome Chronograph Bronze. Al igual que los modelos hermanos, incluye una caja monobloque de 45 mm fabricada en cerámica de alta tecnología de color negro mate y un bisel de cerámica negro de acabado pulido. Sin embargo, a diferencia de los otros modelos, este reloj incorpora laterales de bronce CuSn8 que, con el tiempo, desarrollaran un pátina única . En combinación con los materiales rústicos, este reloj está disponible con una correa de piel oscura y desgastada. Su precio ronda los 4900 CHF.

Con el HyperChrome 1616, retorna un clásico a la colección. El reloj es una versión moderna del Cape Horn, un modelo que Rado produjo entre los años 60 y 70. Fiel al reloj original, el 1616 ofrece una caja de 46 mm en forma de cojín y heredó el puente protector de gran tamaño de la corona. Rado apuesta por la utilización de cerámica gris oscura o negra en el 1616 y aloja un movimiento ETA C07.621 automático de última generación que ofrece una reserva de marcha de 80 horas. Sin embargo, estas características no interfieren con la estética retro del reloj, que mantiene el diseño de la esfera fiel al original y ofrece versiones en los colores blanco, azul o negro. Un HyperChrome 1616 nuevo cuesta cerca de 2100 euros.

Al igual que el 1616, el HyperChrome Captain Cook también es una reedición de un Rado de la década de 1960. El reloj incluye un bisel giratorio para el submarinismo, ofrece 200 m (20 bar) de resistencia al agua y reviste las agujas y los índices de lumen. La caja de 45 mm fabricada en titanio aloja el calibre ETA C07.611. Ofrece tres agujas, fecha a las 3 en punto y 80 horas de reserva de marcha. Un Captain Cook con una esfera azul oscuro y una correa de tela del mismo color cuesta alrededor de 1820 euros. La versión con un brazalete es un poco más cara y su precio asciende a los 2125 euros.

En 2017, Rado lanzó una edición limitada del Capitán Cook con una producción de solo 1962 piezas . Para diferenciar este reloj de su hermano mayor, Rado redujo la caja a los 37,3 mm de diámetro y utilizó el acero inoxidable para su fabricación. Además, solo ofrece 100 m (10 bar) de resistencia al agua. El precio del modelo con un brazalete de acero inoxidable es de unos 1500 euros aproximadamente. Rado utilizó la misma caja para la versión femenina, aunque dotó a la pieza de una esfera blanca engastando índices de diamante a un precio que ronda los 1840 euros.

Los relojes Rado se distinguen especialmente por dos elementos: la resistencia a los arañazos y el poco peso. De hecho, la casa suiza se superó a sí misma con el HyperChrome Ultra Light de 2016. La caja del reloj de nitruro de silicio es extremadamente ligera y aloja el calibre automático ETA A31.L01, que se fabrica en aluminio anodizado y también ofrece poco peso. En total, el reloj pesa solo 56 g y presenta dos versiones: un reloj minimalista de tres agujas sin índices y una esfera que se asemeja a un jardín zen. El otro ofrece una esfera de elaborado diseño de dos niveles y estilo industrial. Independientemente del modelo que elija, ambos cuestan alrededor de 2200 euros.

Aunque ya no se encuentran en el catálogo de Rado, vale la pena mencionar los modelos HyperChrome Small Second, Dual Timer Touch y UTC. Rado eligió una caja monobloque de 42 mm para los tres modelos. De hecho, los relojes actuales de tres agujas también incluyen esta caja. Como corresponde, se fabrican en cerámica de alta tecnología de color negro y cerámica de plasma metálica. El movimiento automático ETA 2895-2 oscila dentro del HyperChrome Small Second y dota al reloj de una ventana para la fecha a las 3 en punto y un segundero pequeño a 6. Un modelo con una correa de piel cuesta, en estado nuevo, alrededor de 2200 euros. Los precios de los modelos con brazaletes de cerámicas de alta tecnología alcanzan los 2400 euros.

El HyperChrome UTC también presenta un movimiento automático: el ETA 2893-2. Ofrece una función de la fecha a las 3 en punto, y un indicador de 24 horas para la segunda zona horaria que se indica a través de una aguja central adicional. Con una correa de piel, el reloj cuesta algo menos de 2250 euros, mientras que las versiones con un brazalete de cerámica alcanzan los 2300 euros.

El HyperChrome Dual Timer Touch completa este trío de relojes. También ofrece un indicador para la segunda zona horaria, que se visualiza a través de una subesfera a las 6 en punto. A diferencia de los dos modelos anteriores, el Dual Timer Touch aloja un movimiento de cuarzo ETA, el F11.001. No cuenta con una función de la fecha ni una corona. De hecho, este reloj Rado ofrece tecnología táctil con sensores laterales que registran el contacto, con los que es posible ajustar el reloj. La versión que incluye una caja de cerámica hightech y una correa de piel de color negro cuesta aproximadamente 1725 euros. La versión blanca con un brazalete de cerámica asciende a los 2160 euros.