Ahora que se comienza a asentar el polvo del primer día del Watches and Wonders, podemos dar un paso atrás y echar un vistazo a las novedades de este año para tratar de entender los lanzamientos de ciertos relojeros. Con algunas novedades controvertidas como el Land-Dweller acaparando los titulares, es importante apartar la mirada de la histeria y fijarse en lo que han aportado otras marcas.
Tudor se centra en el Black Bay
El Black Bay 58 es fácilmente uno de los relojes más populares de Tudor, al igual que toda la colección Black Bay y todas sus diversas subcolecciones como la Pro, la Chronograph, la One, etc. Sin embargo, el 58 ha sido el campeón de la colección, y Tudor acaba de ampliarla con una variante roja.
Este reloj, que se ofrece con un brazalete de 5 eslabones (la respuesta de Tudor al brazalete jubilee) o con el brazalete estilo Oyster con remaches de imitación de Tudor, se presenta en la caja estándar de 39 mm de diámetro de la colección, con un elegante y delgado perfil de 11.7 mm. Tomando el bisel rojo del Black Bay 41 de 2023 y llevando la idea a otro nivel, este tiene que ser uno de los lanzamientos más elegantes de Tudor en mucho tiempo, y como alguien a quien le encanta el Rolex Oyster Perpetual 41 de esfera coral, éste podría añadirse a mi lista de «aún por comprar».
Además del nuevo Black Bay 58, Tudor también ha lanzado un Black Bay 68 ampliado que tiene un nuevo diámetro de 43 mm, con esfera azul o plateada, ambas con bisel negro. Además, la colección Black Bay Pro ha visto cómo se añadía una esfera plateada a su gama, que anteriormente sólo contaba con una esfera negra. El cronógrafo Black Bay también se ofrece ahora con un brazalete de 5 eslabones, y a la colección Pelagos se le ha añadido un modelo totalmente nuevo, con el Pelagos Ultra. Con una caja mejorada de titanio de 43 mm de diámetro con acentos azules en su esfera negra, y una resistencia al agua mejorada de 1000 metros (desde los 500 metros del modelo anterior), este es el reloj de buceo más robusto de Tudor hasta la fecha.
Jaeger-LeCoultre amplía la colección Reverso
Como suele ocurrir en la temporada de novedades, las marcas suelen repartir su enfoque entre varias de sus colecciones para mantener todo su catálogo fresco y actualizado. Algunas marcas, como Tudor este año, se centrarán en una colección como la Black Bay, pero seguirán prestando atención a otras partes de su oferta. Jaeger-LeCoultre, por su parte, no ha hecho más que ampliar su icónica colección Reverso. Con la incorporación de 15 nuevas variantes a la gama, las novedades de este año ven cómo JLC reconoce que el Reverso es clave para revertir (juego de palabras intencionado, no he podido evitarlo) la suerte de la marca en su intento de recuperar la cuota de mercado perdida.
Para empezar, tenemos tres nuevas variantes con engastes del Reverso One para las damas, dos en oro rosa y una en oro blanco. Presumiendo de coloridos engarces de gemas a lo largo de sus cajas, estas resultan ciertamente un tanto opulentas. Además, JLC ha lanzado una colección de cuatro modelos Reverso Tribute de oro blanco de 45.6 mm x 27.4 mm en edición limitada que rinden homenaje específicamente a las supuestas raíces persas del polo a través de sus esferas de esmalte grand feu y las elaboradas pinturas esmaltadas de sus fondos. Estas cuatro obras de arte, todas ellas creadas en el taller Métiers Rares de Jaeger-LeCoultre, están limitadas a solo 10 piezas cada una.
Adoptando un enfoque más ordinario del Reverso, JLC también ha lanzado variantes del Duoface Small Seconds Reverso con discretas esferas sunburst negras y azules que presentan esferas secundarias plateadas en su reverso. Fabricados en acero inoxidable y con unas dimensiones de 47 mm x 28,3 mm, son el Reverso en su versión más tradicional.
Aunque JLC también ha creado un puñado de variantes del Reverso terriblemente complicadas como el Hybris Artistica, un repetidor de minutos, y un puñado de otros a los que no puedo prestar debida atención en este artículo, el reloj que más me emociona ver es el Reverso Tribute Monoface Small Seconds en oro rosa de 18 quilates. Ofrecido en un impresionante brazalete de malla milanesa de oro rosa de 18 quilates con una preciosa esfera graneada dorada, este reloj es sencillamente impresionante, y una seria señal de que JLC pretende expandir el Reverso hacia nuevos territorios en los próximos años. Con un precio de 44 800 €, es una pieza cara, pero es difícil decir que no es preciosa.
Vacheron Constantin celebra 270 años con estilo
No es frecuente que una casa relojera cumpla 270 años, solo unas pocas lo han logrado, y aún menos han conseguido llegar hasta ahí sin necesitar ser resucitadas en algún momento de su historia. Para celebrar la ocasión, Vacheron Constantin ha hecho todo lo posible para que sus novedades en 2025 sean como cabría esperar.
El pistoletazo de salida de las celebraciones de Vacheron lo dan sus ediciones Traditionnelle y Patrimony para el 270.º aniversario. Vacheron ha comenzado 2025 con fuerza, incluyendo seis variantes de edición limitada en dos colecciones: dos variantes Traditionnelle y cuatro modelos Patrimony repartidos entre las colecciones Moon Phase Retrograde Date y Patrimony Self-Winding (divididos 3/1 respectivamente). Limitados a 370 o 270 piezas, según la variante específica, estos seis relojes presentan todos esferas plateadas con el mismo motivo de cruz de Malta que se diseñó específicamente para este aniversario.
Además de los nuevos modelos Traditionnelle y Patrimony para el 270.º aniversario, Vacheron también ha lanzado un trío de modelos Traditionnelle de dial transparente, cada uno de ellos limitado a 370 piezas. Un calendario completo, un calendario perpetuo fecha retrógrada y un tourbillon fecha retrógrada: estos tres relojes comparten las mismas cajas de platino de 41 mm de diámetro, pero con ligeras desviaciones en sus grosores. Este trío de relojes, que luce esferas transparentes en las que se muestra su funcionamiento interno, y el resto de las esferas plateadas con el mismo diseño grabado decorado con la cruz de Malta, es increíblemente impresionante.
Por último, en el caso de Vacheron, tenemos dos complicaciones: una impresionante y otra asombrosa. Empezando por el más normal de los dos, tenemos el Traditionnelle Tourbillon Perpetual Calendar. Limitado a 127 piezas y utilizando un nuevo movimiento cal. 2162 QP/270, este reloj de platino de 42 mm solo mide 11.1 mm de alto, lo que significa que su mayor diámetro está muy bien equilibrado en la muñeca. Con la misma esfera plateada en forma de cruz de Malta mencionada anteriormente, se trata de una impresionante exploración de los talentos relojeros de Vacheron, pero no deslumbra tanto como el siguiente reloj.
El Les Cabinotiers «Solaria Ultra Grand Complication», que debuta como ejemplar único, es el reloj de pulsera más complicado jamás fabricado. Con 41 complicaciones, el Solaria llega justo un año después de que Vacheron presentara el Les Cabinotiers «Berkley Grand Complication», un reloj de bolsillo con 63 complicaciones. Un reloj de pulsera increíblemente impresionante que un solo relojero tardó ocho años en fabricar, la lista de complicaciones de este reloj podría merecer un artículo por sí sola. Con un tamaño de tan sólo 45 mm x 15 mm, esta belleza de doble esfera es un alarde de maestría técnica sin igual que nos recuerda perfectamente la razón exacta por la que Vacheron Constantin se encuentra en la santísima trinidad. Aunque el reloj es actualmente único, los pedidos están abiertos para que los clientes puedan hacerse con el suyo, pero los relojes se personalizarán para que todos sean únicos.
Reflexiones finales
Es difícil hacerse a la idea de todo lo que se ha publicado hasta ahora. Después de hoy, sigo sintiendo que solo he arañado la superficie de lo que las marcas han lanzado, y eso es algo bueno. Con el reloj de pulsera más complicado jamás ideado, un precioso Reverso de oro rosa con brazalete milanés, y un Black Bay 58 rojo, creo que este año ya está a la altura de las expectativas. Y en ese sentido, estoy terriblemente emocionado por seguir indagando en lo que se ha lanzado para ver qué otros tesoros aguardan.
