Ahora que mis compañeros han tenido la oportunidad de explorar sus sueños con este pequeño juego mental, me toca a mí reunir una hipotética colección de relojes por 24 000 €. Suena divertido, así que voy manos a la obra. Mi colección ficticia consta de tres relojes y se desarrolla bajo el tema de «relojes para romper el hielo». Para ello, he optado deliberadamente por modelos que no siguen la corriente dominante, pero que llaman la atención inevitablemente. Como ya he dicho, nuestro pequeño experimento mental busca ser divertido, y estos relojes lo son.
Un cohete en la muñeca: Ulysse Nardin Freak X
Mi elección para el reloj número uno es el Ulysse Nardin Freak X. Se trata del hermano pequeño del Freak original, con el que Ulysse Nardin causó sensación en 2001. Ambos relojes se caracterizan por sus singulares calibres, diseñados por el maestro relojero Ludwig Oechslin. Estos modelos no poseen agujas convencionales, ya que esta tarea la realiza el propio movimiento. Los puentes esqueletizados del movimiento tienen la forma estilizada de una manecilla y giran en torno al centro del reloj, incluyendo todas las ruedas dentadas. El escape con áncora, la rueda de escape y el volante también se mueven constantemente en círculo. Por tanto, técnicamente hablando, se trata de un carrusel, un pariente cercano del tourbillon. Para que el fascinante movimiento pueda verse en todo su esplendor, Ulysse Nardin ha prescindido de la esfera. El calibre simplemente está enmarcado por un anillo de índices horarios aplicados. Al igual que las «agujas», estos están provistos de una buena capa de material luminiscente. Gracias a ello, se puede ver fácilmente la hora incluso en la oscuridad. A pesar de sus 43 mm de diámetro, el Freak X es sorprendentemente cómodo. Es probable que esto se deba, en parte, al hecho de que el Freak X está fabricado en titanio o fibra de carbono y, por tanto, es muy ligero. En Chrono24 puede encontrar un Freak X de titanio en buen estado de conservación a partir unos 16 000 €, un precio perfecto para la pieza central de mi pequeña colección imaginaria.

MB&F para principiantes: M.A.D. 1 Red
Hay pocos relojes que dan tanto pie a entablar una conversación como las creaciones de MB&F (Maximilian Büsser and Friends). Los relojes, denominados «Machines», se crean en colaboración con relojeros independientes que dan rienda suelta a su creatividad. El resultado son verdaderas obras de arte, algunas de las cuales parecen ser de otro mundo. El problema: con nuestro presupuesto ficticio de 24 000 €, no podemos sino soñar con un MB&F. La solución es el M.A.D. 1 Red: el reloj de MB&F para principiantes. Maximilian Büsser lanzó la marca M.A.D. Editions en 2020 como una alternativa asequible a los Machines de MB&F. Para mantener los costes de estos relojes bajo control, Büsser apuesta por la compra de movimientos estándar, que luego se modifican para adaptarlos a sus propias necesidades. En el caso del M.A.D. 1 Red, se utiliza un Miyota 821A muy modificado. Una de las principales razones de esta elección es el hecho de que el rotor de este movimiento gira significativamente más rápido y con mayor facilidad que el de un calibre de ETA o Sellita, por ejemplo. Sin embargo, el rotor convencional ha sido sustituido por un «Battle Ax Rotor» de tres caras dotado de material luminiscente. Lo más destacado: el movimiento se instala con la parte inferior hacia arriba. En lugar de una esfera, bajo la cubierta de cristal de zafiro se ve el alegre rotor giratorio. El conjunto recuerda en cierto modo a un «fidget spinner» y ofrece un espectáculo fascinante, sobre todo en la oscuridad. Este reloj muestra la hora a través de dos cilindros superpuestos en el lateral del reloj. Con una altura de casi 19 mm, el M.A.D. 1 Red no cabe bajo el puño de ninguna camisa. Pero tampoco tiene por qué hacerlo. Un reloj como este quiere ser visto; la discreción no es lo suyo. Y, con un precio de unos 4200 € en Chrono24, es casi una ganga.

Ding, dong: Christopher Ward C1 Bel Canto
El Christopher Ward C1 Bel Canto encaja perfectamente en mi hipotética colección de relojes por 24 000 €. Aunque durante mucho tiempo esta marca de relojes de alta calidad pero asequibles solo era conocida entre los entendidos, el Bel Canto catapultó a Christopher Ward a la fama de la noche a la mañana. El reloj incluso fue galardonado con la «Petite Aiguille» en el prestigioso Grand Prix d’Horlogerie de Genève (GPHG) de 2023. ¿Pero qué hace que el Bel Canto sea tan extraordinario? En primer lugar, el reloj tiene un mecanismo de sonería (una «sonnerie au passage», para ser precisos), por lo que suena cada hora completa. Además, se trata de un reloj que atrae todas las miradas. El mecanismo de sonería está expuesto en la parte delantera. Forma un marco para la subesfera esqueletizada ubicada a las 12 horas, que se emplea para indicar la hora. Con un diámetro de 41 mm y una altura de 13.2 mm, este reloj de titanio también es muy ponible. Y por último, pero no menos importante, está el precio: en Chrono24 puede encontrar ejemplares de segunda mano en excelentes condiciones por algo menos de 3500 €, ¡algo único para un reloj con un mecanismo de sonería de tal calidad!

Resumen
Ahí tenemos, pues, mi colección ficticia de relojes por 24 000 €. Espero haber podido inspirarle un poco a no recurrir siempre a los modelos más populares.