Junghans max bill Automatic

La colección Max Bill es un clásico absoluto de la casa Junghans. Su diseño purista fue creado por Max Bill, arquitecto, artista y egresado de la Bauhaus. Para este, que el reloj fuera lo más legible posible era un prioridad. Max Bill logró lo que se propuso con la estructura clara típica de la Bauhaus: índices tipo bastón largos y finos para las horas, unos índices más cortos para los minutos, agujas delgadas y bien proporcionadas y cifras arábigas de diseño claro. El resultado fue un reloj cuyo diseño, aparte de elegante, se convertiría en atemporal.

Por supuesto, estos atributos también se aplican al Max Bill Automatic. En su caja de acero inoxidable de 38 mm late un calibre automático del tipo J800.1. Este es un movimiento ETA 2824-2 modificado y refinado por Junghans. No obstante, la versión original de este reloj albergaba el legendario calibre de manufactura J83.

Junghans ofrece este reloj de tres agujas con distintas variaciones de la esfera. Así pues, podrá elegir entre una esfera blanca plateada, una gris antracita o una negra mate. Además, también deberá escoger qué diseño base de la esfera prefiere de entre los tres disponibles: por una parte está la variante clásica con índices tipo bastón y números arábigos como marcadores horarios; por otra, la variante con números adicionales para los minutos, y finalmente, la versión más simple sin ningún número. Asimismo, algunos modelos presentan una ventana para la fecha en la posición de las 3 horas. La esfera y las agujas están protegidas por un cristal plexiglás abovedado que refuerza la apariencia exquisita de este reloj.

El Max Bill Automatic se lleva normalmente con una correa de piel de becerro en marrón rojizo, gris, negro o beis. También puede encontrar una versión con brazalete de malla milanesa.

Si busca un reloj que sea lo más fiel posible al Max Bill original de 1956, el modelo con índices tipo bastón más cortos y números para las horas es lo que está buscando. Estos modelos se mantienen fieles al diseño original y vienen con una característica especial: en este modelo tanto las agujas como los números brillan en la oscuridad. La esfera de estos modelos está disponible en color antracita o negro. Su precio, sin estrenar, ronda los 720 €. De segunda mano, puede encontrar este modelo a partir de 585 €.

La versión del Max Bill Automatic con una escala de minutos expandida tiene un toque más deportivo. Además de los índices tipo bastón y números para las horas. Estos relojes presentan también números pequeños para los minutos en un anillo alrededor de la esfera blanca plateada. Asimismo, las agujas y los puntos luminiscentes a las 3, 6, 9 y 12 horas hacen posible que se pueda leer la hora en condiciones de poca luz. El modelo más interesante de esta serie presenta una caja de acero inoxidable dorada y un indicador de la fecha a las 3 horas. El precio de un ejemplar sin estrenar ronda los 795 €. El precio desciende a unos 750 € si prefiere un ejemplar con caja de acero pulido con fecha. Para ahorrarse unos 50 € adicionales, puede decidirse por modelo sin fecha. De segunda mano, deberá invertir entre 600 € y 700 €, dependiendo de la versión.

Si su estilo es especialmente modesto, le encantarán los modelos sin números. En estas versiones, los índices tipo bastón son algo más largos para mantener las proporciones. Estos relojes están disponibles con esferas de color blanco plateado o negro mate, con caja de acero inoxidable dorada o pulida y con o sin fecha. Dependiendo de modelo que escoja, deberá invertir entre 725 € y 775 € para un ejemplar sin estrenar. Los ejemplar de segunda mano son de media unos 100 € más baratos.

Los orígenes del Max Bill de Junghans se remontan a mediados de la década de 1950. La casa de relojes encargó entonces al pintor, escultor y arquitecto Max Bill la tarea de crear un reloj de cocina funcional. El resultado vio la luz en 1956: un reloj fácil de leer que se regía por el principio principal de la escuela Bauhaus, "la forma sigue a la función".

Cinco años más tardes, el diseño se adaptó a un reloj de pulsera que pronto cosecharía grandes éxitos. El hecho de que los relojes actuales se hayan desviado muy poco del original demuestra la atemporalidad del diseño de Bill, que incluso llegó a conquistar al Museo de Arte Moderno de Nueva York (MoMA), que vende el reloj desde hace algunos años en su tienda.

La colección actual comprende, aparte del Max Bill Automatic, un cronógrafo, modelos de mujer y versiones con movimientos de cuarzo. Asimismo, Junghans combina el diseño clásico de este reloj con la tecnología más avanzada en el Max Bill MEGA. En este modelo late un calibre radiocontrolado desarrollado por Junghans, el J101.65, que dota al reloj de una precisión incomparable.